José
Guerrero, pintor abstracto.
Nació en Granada en 1914 y murió en Barcelona en 1991 a los 77 años
de edad.
Estuvo
enmarcado dentro del expresionismo abstracto. La
Graham
Foundation
le concedió una prestigiosa beca para trabajar en un proyecto
conjunto de arquitectos, pintores y filósofos “para ver cómo
podría remodelarse la ciudad de Chicago.”
Familia
Hijo
de Emilio García López y de Gracia Guerrero Padial, de condición
humildes. En 1929 murió su padre y la delicada situación en que
quedó la familia le obligó con 14 años, a interrumpir los
estudios para iniciar su peregrinaje laboral. Se casó en 1949 con la
periodista estadounidense Roxane Whittier Pollock. Tuvieron una
hija.
Formación
Estudió
con los Escolapios de Granada hasta los 14 años. En 1931 se
matriculó en la Escuela de Artes y Oficios de Granada, donde
siguió estudios en horario nocturno, ya que durante el día trabajó
en varios oficios, entre ellos los de carpintero y camarero.
Cuando
acabó la guerra civil viajó a Madrid para estudiar en la
Academia de San Fernando, se financió sus estudios con la venta de
los cuadros que iba pintando y de realizar cartelones para un cine de
la Gran Vía. Merece reseñarse los cinco premios cosechados y la
matrícula de Honor, siempre en las materias de Dibujo y Colorido y
Composición.
Estancia
en París
En
1945, marchó a París gracias a la beca que le concedió el gobierno
francés para estudiar la pintura al fresco en la École
des Beaux Arts. Residió en
el pabellón español de la Cité
Universitaire. Conoció
allí en persona la obra de los pintores españoles de la Escuela de
París y la vanguardia francesa.
Academia
de Roma
El
lugar que ocupa Roma dentro de ese intenso período de búsqueda que
protagonizó Guerrero a finales de los años cuarenta es capital. En
Roma estuvo, entre 1947 y 1948, y pintó una serie de vistas que
después expuso con éxito en la Galería del Secolo; allí conoció,
a su futura esposa y algunos de los pintores italianos del momento.
Estancia
en Londres
Hacia
finales de 1948 pasó una pequeña estancia en Londres para estudiar
inglés, y José siguió pintando, e incluso llegó a exponer sus
trabajos, en una muestra conjunta con Hortense Kelly, en la St.
George’s Gallery
Estancia
en Estados Unidos
A
finales de 1949, Guerrero se marchó a los Estados Unidos, primero a
Filadelfia, para vivir en casa de sus suegros, y ya en 1950, a Nueva
York, donde encontraron acomodo. Allí realizó el que iba a ser el
último de sus cuadros figurativos, un autorretrato. Y a continuación
se resolvió a pintar las primeras obras rigurosamente abstractas. En
1953 José Guerrero adquirió la nacionalidad norteamericana.
Exposiciones
Al
poco de instalarse en Nueva York, José conoció a varios de los
pintores más destacados del momento, con algunos de los cuales le
terminaría uniendo una especial amistad. Aprendió las técnicas del
grabado. Conoció también a la familia Gacía Lorca y a otros
intelectuales españoles en el exilio.
Realizó
la primera exposición en el Arts Club de Chicago, conjuntamente con
Joan Miró.La compra por parte del Guggenheim de uno de los murales
portátiles de José, le llevó a celebrar la primera individual de
Guerrero en Estados Unidos, y lo fichó uno de los mejores
marchantes. José había encontrado, por fin, su lugar en el mundo
del arte.
Crisis
Cuando
José estaba empezando a disfrutar de una posición que le había
costado mucho conquistar, su vida interior se colapsó y se vio
abocado a un psicoanálisis. Lo que desencadenó la crisis fue el
estrés que le sobrevino en Chicago. Allí mismo le aconsejaron
psicoanalizarse. Y José, que ya sabía de las virtudes de ese
procedimiento por algunos de sus colegas, se avino a someterse a él.
El tratamiento se prolongó por cuatro años. Tras superarlo, José
ganó una gran capacidad de análisis que, en lo sucesivo, aplicó al
juicio de su propia obra, lo que le permitió desarrollar con gran
lucidez su sentimiento plástico.
Regreso
a España
Acabado
el psicoanálisis hizo un viaje a España a solas y en Madrid
comprometió su presencia en una nueva galería que iba a abrir Juana
Mordó. José volvió a América y 1963, marcó el inicio de una
serie de cuadros con títulos españoles: Generalife, Calvario,
Alpujarra, Sacromonte, etc.
El
año siguiente, después de una exposición colectiva, presentó su
primera exposición individual. En 1965 regresó a España con su
familia y prolongaron su estancia por tres años, instalándose en
Madrid.
Cuenca
Guerrero
compró una casa en Cuenca, que entonces era uno de los enclaves más
punteros del arte contemporáneo. El Museo de Arte Abstracto Español
estaba en ciernes, y el grupo de Cuenca quería concentrar en la
ciudad la parte más viva de ese arte, a su vez el más vivo del
momento. Allí, José trabó amistad, con Torner, Fernando Zóbel,
Gerardo Rueda y Manolo Millares. José asistió a la inauguración
del Museo, en cuya colección figuraban entonces sus
“Barrera con Rojo” y “Ocre y Rojo Sombrío”.
La
Brecha de Víznar
En
1965 hizo un viaje por Andalucía en el que, entre otras cosas,
visitó el Barranco de Víznar (donde José hizo numerosos apuntes
figurativos que culminarían en un cuadro de capital importancia en
su trayectoria: La Brecha de
Víznar. Su esposa Roxane
perfiló un reportaje para Life con motivo del 30 aniversario de la
muerte de García Lorca, que se publicó en 1966, profusamente
ilustrado bajo el título “La
España que nutrió a García Lorca”.
Exposición
antológica
En
1976, en Granada, se celebró su primera exposición antológica.
Tuvo lugar, en las salas del Banco de Granada y de la Fundación
Rodríguez Acosta. Constaba de 54 lienzos, incluyendo algunos de los
pintados a principios de los años cuarenta. Ese mismo año,
coincidiendo con su continuada presencia granadina, José asistió al
Homenaje a Federico García Lorca en Fuente Vaqueros.
Exposición
en Madrid
En
1980 tuvo lugar en la Sala conocida como "de las Alhajas"
de Madrid una exposición de José Guerrero producida por el
Ministerio de Cultura y la Caja de Ahorros de Madrid que supuso el
espaldarazo definitivo para la consagración de Guerrero como uno de
los referentes capitales de la pintura española contemporánea.
Década
de 1980
La
década de 1980 supuso mucha actividad para Guerrero: participó en
la carpeta conmemorativa del V Centenario del nacimiento de Bartolomé
de las Casas, apoyó con sus trabajos varias publicaciones, realizó
el cartel del Cincuentenario del Estreno de Yerma en el Teatro
Español de Madrid, impartió un Taller de Arte Actual del Círculo
de Bellas Artes y una conferencia en el Seminario “El
arte visto por los Artistas”,
organizado por Francisco Calvo Serraller en el Palacio de la
Magdalena de Santander, y le fue concedida la medalla de Oro de
Bellas Artes.
Hay
cuadros de Guerrero en el Museo Guggenheim de Nueva York, en
el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid) y en
el Museo de Arte Abstracto Español (Cuenca).
Premios
y distinciones
Entre
los premios y distinciones que recibió a lo largo de su vida, cabe
mencionar que fue nombrado:
- Caballero de las Artes y las Letras por el gobierno francés (1959).
- Medalla de Oro de Bellas Artes (1984)
Memoria
En Granada existe
un centro de arte que lleva su nombre, Centro José Guerrero,
inaugurado en el año 2000, con fondos pertenecientes a la
colección familiar, que los cedió a la Diputación de Granada.
Autor: Feliciano Robles
No hay comentarios:
Publicar un comentario