Eduardo
García Peregrín,
Doctor en Farmacia, catedrático, investigador y académico. Nació
en Baza (Granada) en 1942.
Su mayor reconocimiento siempre lo encontró entre sus alumnos, que se pueden contar por miles, y sus discípulos, que han consolidado distintos grupos de investigación en diversas universidades españolas (Granada, Madrid, Sevilla, Almería) y centros del CSIC.
Familia. Fue el primer hijo del matrimonio formado por Eduardo y Encarnación. Siendo joven murió su madre y años después su padre se casó, en segunda nupcias, con Isabel Mañas, que fue su segunda madre para él y sus hermanas. Está casado con Paqui Fuentes y ha tenido cuatro hijos que le han dado nueve nietos.
Formación. Su infancia transcurrió en Baza. Estudió el Bachillerato en la Academia «Santa Bárbara» de esa ciudad. Luego se trasladó a Granada, y en su Universidad cursó la Licenciatura en Farmacia. Gracias a las buenas calificaciones obtenidas le permitieron disfrutar de una beca del Ministerio de Educación.
En 1968 defendió su Tesis Doctoral, dirigida por el profesor Federico Mayor Zaragoza. Su tesis fue en la que por primera vez en la facultad se utilizaron isótopos radioactivos, siendo merecedora del premio extraordinario de Doctorado.
En 1972 realizó una estancia postdoctoral en el Laboratoire de Chimie Biologique de París dependiente del CNRS.
Le gustó compaginar su labor docente e investigadora con la de estudiante. En este sentido, después de cumplir 60 años, realizó la Licenciatura en Ciencias Religiosas en el CETEP de Guadix, dependiente de la Pontificia Universidad de Comillas. Su Tesina de Licenciatura la tituló «La dignidad de la vida humana y la biomedicina», calificada con sobresaliente. Siendo estudiante de este centro, tuvo el honor de pronunciar el Discurso de Apertura del Curso 2004/05 bajo el tema «Estatuto ético de las células madre».
Posteriormente, realizó un Master en Bioética, impartido por la Facultad de Teología de Granada, en el que fue a la vez alumno y profesor de uno de los módulos relacionados con la Biología Molecular. Por su trabajo final sobre «Ética e investigación» recibió también la máxima calificación.
Docencia. Durante sus estudios de Doctorado, se inició en la docencia como Profesor Universitario en la Facultad de Farmacia. Pasó por todos los escalafones de profesorado que había en esa época: Profesor Ayudante, Profesor Adjunto Interino y Profesor Adjunto Numerario.
En 1975 obtuvo por oposición la plaza de Profesor Agregado de la Facultad de Ciencias de Granada y en 1981 fue nombrado Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la misma Facultad.
Eduardo García fue uno de los profesores que implantaron la nueva Licenciatura de Biología en Granada, habiendo impartido docencia en ella desde la primera promoción de la misma.
Investigación. Ha dirigido un amplio grupo de investigación (CTS 141) sobre el metabolismo del colesterol, dentro del Plan Andaluz de Investigación. Fruto de estos trabajos es la dirección de cerca de veinte Tesis Doctorales y otras tantas Tesinas de Licenciatura en Farmacia y Ciencias. Ha participado en numerosos Congresos y Simposios nacionales e internacionales, en calidad de Conferenciante, Ponente, Presidente, Secretario o Tesorero.
Publicaciones. Ha publicado unos 150 artículos en revistas científicas internacionales recogidas en el Citation Index Report, alcanzando diversos premios y distinciones. En Internet están relacionadas sus publicaciones más relevantes.
Ha escrito diversos libros, entre los que destacan los siguientes: «La investigación como colaboración con Dios en la creación», «Ética e investigación como búsqueda de la verdad», «La dignidad de la vida humana», «La fraternidad, precursora de la ecología en Francisco de Asís», así como «Bioética. Temas para el debate» (Vol. 1 y 2) y «Reflexiones al hilo de la noticia», en los que recogen los artículos publicados en revistas farmacéuticas y en el diario IDEAL de Granada, respectivamente.
Ha colaborado con varios capítulos en distintos libros escritos con motivo de la jubilación, entre otros, de los profesores Eduardo López Azpitarte (Facultad de Teología de Granada), Federico Mayor Zaragoza (Universidad Autónoma de Madrid) y Urbano Alonso del Campo (Universidad de Granada), así como de varios libros de temas bioéticos.
Participó con sendas ponencias en el I Congreso Internacional de Ecología y Religiones y en el Congreso Poesía y Música para la Paz, organizados por el Centro UNESCO de Andalucía, del que es uno de los miembros fundadores.
Divulgación. Como divulgador del conocimiento, colabora con artículos en prensa diaria y de otra periodicidad, principalmente Ideal de Granada, Proyección (Facultad de Teología de Granada), Pensamiento y Tendencias de las Religiones (Pontificia Universidad de Comillas), así como en revistas editadas por cooperativas farmacéuticas.
Otras actividades. En la década de 1980 participó en la preparación y desarrollo del Sínodo Diocesano, como representante de la Pastoral Universitaria, actuando como uno de los siete moderadores de los grupos que se nombraron para la discusión de los temas. Al finalizar el Sínodo, fue propuesto como miembro del Consejo Diocesano de Laicos, siendo elegido Presidente del mismo y miembro del Consejo Pastoral Diocesano.
Academias. En 1994 ingresó como Académico de Número en la Academia de Ciencias Matemáticas, Físico-Químicas y Naturales de Granada, con un discurso titulado «El colesterol, paradigma del bien y del mal». Durante muchos años ha sido Tesorero de la misma.
Premios. Premio a la Investigación «450 Aniversario de la Universidad de Granada», concedido por el Ayuntamiento de Granada.
Homenaje. En el acto de homenaje de su jubilación se presentó un video sobre su vida y un libro titulado «Eduardo García Peregrín, Júbilo y Vida» en el que han colaborado cerca de 40 de sus discípulos, entre ellos su propio hijo al que le había dirigido su Tesis Doctoral. Asimismo, se le dio el nombre de «Prof. García Peregrín» al aula-seminario del Departamento en la Facultad de Ciencias de Granada.
Según Federico Mayor Zaragoza «Eduardo ha sido bioquímico, investigador, docente, divulgador científico, versado después en teología y bioética… pero, sobre todo, un ser humano que ha sabido extender su mirada limpia y serena alrededor y muy lejos. Que ha sabido tender la mano, que se ha atrevido a contar sus puntos de vista…
Autor. Feliciano Robles
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